jueves, 19 de septiembre de 2013

Donde fuiste feliz alguna vez...


 

Donde fuiste feliz alguna vez
no debieras volver jamás, el tiempo
habrá hecho sus destrozos, levantando
su muro fronterizo
contra el que la ilusión chocará estupefacta.


Félix Grande está en lo cierto....porque....


El tiempo habrá labrado,
paciente, tu fracaso
mientras faltabas, mientras ibas
ingenuamente por el mundo
conservando como recuerdo
lo que era destrucción subterránea, ruina.


Pero no se puede resolver esta contradicción....ni siquiera Félix Grande...



Mas sabes que la dicha es como un criminal
que seduce a su víctima
que la reclama con atroz dulzura
mientras esconde la mano homicida.
Sabes que volverás, que te hallas condenado
a regresar, humilde, donde fuiste feliz.

Sabes que volverás
porque la dicha consistió en marcarte
con la nostalgia, convertirte
la vida en cicatriz;
y si has de ser leal, girarás errabundo
alrededor del desastre entrañable
como girase un perro ante la tumba
de su dueño... su dueño... su dueño


No se puede girar siempre, errabundo...